La propuesta de Marisol García Segura podría establecer un Registro Público del Derecho de Autor para aportaciones vocales.

CDMX a 1 de abril, 2024.- En un audaz movimiento que busca revolucionar la protección de los derechos de autor en el ámbito vocal, la diputada Marisol García Segura, del partido Morena, ha presentado una iniciativa que podría cambiar el panorama para locutores, actores de doblaje y artistas en México. La propuesta sugiere reformas significativas a la Ley Federal del Derecho de Autor, con el objetivo de crear un Registro Público dedicado exclusivamente a las aportaciones vocales de estos profesionales.

 

La esencia de esta iniciativa yace en el reconocimiento de la voz como una obra digna de protección legal, en una era donde la tecnología ha permitido la creación y explotación de voces sintéticas sin el consentimiento de sus verdaderos dueños. Con la creciente capacidad de replicar la entonación y el timbre característico de cualquier persona, la industria enfrenta un desafío sin precedentes: proteger la originalidad y los derechos de quienes usan su voz como herramienta de trabajo.

 

Según la propuesta de García Segura, este registro no solo reconocerá oficialmente la voz como una obra protegida sino que también limitará el uso comercial de estas aportaciones a un máximo de cinco años, a menos que se acuerde lo contrario. Esta medida busca ofrecer una mayor seguridad a los profesionales del ámbito vocal, asegurando que su trabajo no sea explotado indefinidamente sin una compensación justa.

 

La iniciativa también aborda el problema del uso no autorizado de voces sintéticas, un fenómeno cada vez más común en la producción de contenidos audiovisuales. La ausencia de un marco legal específico para la protección de las aportaciones vocales ha dejado a muchos profesionales vulnerables a la explotación, sin reconocimiento ni remuneración adecuada por su trabajo. Esto no solo afecta a su estabilidad económica sino también a su integridad profesional.

 

Con el registro propuesto, se espera que locutores, actores de doblaje y artistas puedan ejercer un mayor control sobre el uso de su voz, asegurando el crédito y la compensación que merecen. Esta medida no solo beneficiaría a los profesionales individuales sino que también elevaría los estándares de calidad y ética en la producción de contenido audiovisual en México.

 

La iniciativa ya ha sido turnada a la Comisión de Cultura y Cinematografía, donde se espera que se realicen las deliberaciones pertinentes para su eventual aprobación. De ser exitosa, esta reforma marcaría un avance significativo en la lucha por los derechos de autor en el ámbito vocal, sentando un precedente importante para la protección del talento artístico en el país.