Ciudad de México, martes 21 de febrero de 2024.- En un giro dramático que intensifica el escenario político mexicano, la candidata presidencial opositora, Xóchitl Gálvez Ruiz, ha lanzado un llamado urgente para investigar el presunto financiamiento ilícito en las campañas del presidente Andrés Manuel López Obrador de 2006 y 2012. Esta solicitud surge en respuesta a recientes revelaciones y testimonios que sugieren desvíos en la administración pública, beneficiando directamente al presidente y a su círculo cercano.
La investigación liderada por Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) ha arrojado luz sobre una supuesta triangulación de recursos públicos y contratos dentro de Pemex, favoreciendo al empresario Javier Núñez López y, por extensión, a López Obrador y familiares. Gálvez Ruiz no ha dudado en calificar la situación actual como «uno de los sexenios más corruptos de la historia», citando la entrega de contratos por valor de 100 mil millones de pesos a empresas vinculadas al presidente.
Además, la candidata pone en entredicho la gestión de Pemex bajo la actual administración, señalando un borde de quiebra que, en su opinión, va más allá de lo financiero y se adentra en terrenos de corrupción profunda.
La controversia se extiende con acusaciones hacia Núñez López por supuestamente canalizar fondos para la campaña de López Obrador en 2012, una práctica que, según Gálvez, persiste con contratos cuestionables en Pemex. Otro reportaje ha salido a la luz, involucrando a los sobrinos del presidente, Osterlen y Pedro Salazar Beltrán, en negociaciones de contratos millonarios, lo que Gálvez interpreta como evidencia de una corrupción familiar extendida.
La crítica de Gálvez también alcanzó a Claudia Sheinbaum, rival política y candidata de la coalición Juntos Haremos Historia, por el opaco financiamiento de su campaña de espectaculares, exigiendo transparencia y justicia en las investigaciones de financiamiento ilegal.
Este creciente escándalo plantea serias preguntas sobre la integridad de las campañas políticas en México y pone en juego la confianza pública en el proceso electoral. Gálvez insiste en que solo una investigación exhaustiva podrá clarificar la verdadera profundidad de esta crisis de corrupción y garantizar un futuro político más limpio y transparente para México.
