¡La Unión Europea multa a Apple con 539 millones de dólares por caso antimonopolio frente a Spotify!

La batalla entre dos gigantes de la música en streaming, Spotify y Apple Music, alcanza un nuevo punto álgido con la multa de 539 millones de dólares impuesta por la Unión Europea a Apple. Esta sanción se deriva de acusaciones de prácticas antimonopolio relacionadas con el bloqueo de servicios de terceros en dispositivos Apple.

 

La Comisión Europea ha concluido que Apple obstaculizó el acceso de otros servicios de música en streaming en sus dispositivos para favorecer su propia plataforma, Apple Music. La investigación, iniciada en 2021 a raíz de una denuncia de Spotify en 2019, reveló que las políticas de la App Store imponían restricciones injustas a la competencia, violando las leyes europeas de competencia.

 

En el centro del conflicto se encuentra la política de la App Store que prohíbe a las aplicaciones de terceros informar a los usuarios sobre opciones de suscripción más económicas fuera de la plataforma, obligándolas así a utilizar el sistema de pago de la tienda, que conlleva comisiones de hasta el 30%.

 

Aunque la multa de 539 millones de dólares representa un golpe significativo para Apple, es notablemente menor que la cifra inicialmente planteada de 40,000 millones de dólares. Esta no es la primera vez que Apple enfrenta sanciones por conductas antimonopolio, habiendo reducido multas previas en casos similares.

 

La reacción de Apple ante esta decisión ha sido cautelosa, señalando su derecho a apelar la decisión ante los tribunales de la UE. La empresa también ha anunciado recientemente modificaciones en las políticas de la App Store, permitiendo a los desarrolladores ofrecer sus aplicaciones en plataformas externas para evitar el pago de comisiones.

 

Sin embargo, Apple ha dejado en claro que no brindará reembolsos ni asistencia a los clientes que utilicen servicios fuera de su sistema de pago, subrayando también las posibles vulnerabilidades de seguridad asociadas con estas prácticas.

 

Este último capítulo en la disputa entre Spotify y Apple refleja las crecientes tensiones en el mercado de la música en streaming y la importancia cada vez mayor de las regulaciones antimonopolio en la industria tecnológica.