El presidente López Obrador enfatiza en la necesidad de una acción urgente por parte de la ONU y anuncia la repatriación de mexicanos desde Israel.

Ciudad de México, 9 de octubre del 2023.- Esta mañana, el presidente Andrés Manuel López Obrador tomó una firme postura con respecto al conflicto en curso en Medio Oriente entre Hamas e Israel. En sus propias palabras, México clama: “No queremos la guerra, no queremos la confrontación, no queremos la violencia”.

En lugar de condenas, López Obrador destaca la urgente necesidad de buscar soluciones pacíficas a través del diálogo. Esta declaración se produce en un momento crítico para el mundo, mientras observa con creciente preocupación los crecientes enfrentamientos en la región.

En medio de este escenario internacional, surgen preocupaciones adicionales para México. Tres mexicanos presuntamente han sido secuestrados por miembros de Hamas. El mandatario asegura que están en comunicación con las familias de los afectados y se están realizando esfuerzos de búsqueda. Como medida inmediata, el gobierno enviará dos aviones de la Fuerza Aérea Mexicana para repatriar al menos a 300 mexicanos que se encuentran en la zona del conflicto.

El papel de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) no pasó desapercibido en el discurso del presidente. Él insiste en que la ONU tome una acción determinante, más allá del mero protocolo. Propone que se convoque de inmediato a una asamblea general, involucrando a todos los países miembros. Su principal crítica radica en la dependencia del Consejo de Seguridad, que a menudo bloquea las iniciativas en busca de la paz.

El llamado es claro: México está a favor de la paz, basado en principios de no intervención, autodeterminación de los pueblos y solución pacífica de las controversias.

Al abordar la delicada cuestión de la causa histórica palestina, López Obrador es cauteloso: “Nosotros no queremos tomar partido”. Su principal objetivo es ser un factor para la búsqueda de una solución pacífica. Su llamado resuena con la urgencia de un mundo que ve, con dolor, la escalada de la violencia y la pérdida de vidas.

Finalmente, López Obrador critica abiertamente el procedimiento obsoleto del Consejo de Seguridad de la ONU. Argumenta que debe haber un cambio en cómo las potencias mundiales abordan estos conflictos y destaca la necesidad de que la ONU tome un papel más activo y protagónico.

En tiempos de crisis, mientras las potencias mundiales buscan estrategias, México envía un mensaje claro: el diálogo y la paz son la única salida.