La inversión en el Sistema Nacional de Refinación (SNR) por parte de Petróleos Mexicanos (Pemex) está en camino de alcanzar la considerable cifra de 75 mil millones de pesos al cierre de este sexenio. Estas inversiones son un paso crucial hacia la autosuficiencia energética, según Fidel Vizcaíno García, suplente de la subdirección de Producción de Petrolíferos Transformación Industrial.

Según el funcionario, entre 2019 y 2024, se habrán invertido alrededor de 75 mil millones de pesos en las seis refinerías del país, lo que ha impulsado la recuperación del proceso de crudo. Este proceso pretende llevar a México a la capacidad de exportar gasolinas y diésel para 2025, una perspectiva que habría sido inimaginable hace unos años.

Vizcaíno García compartió esta información durante su participación en el Quinto Congreso de Energía en Boca del Río, Veracruz. Él destacó que desde el inicio de la administración actual, se han emprendido acciones decididas para recuperar la soberanía energética, que había sido erosionada por la falta de inversión en el SNR desde 2010.

Según los datos proporcionados por el funcionario, hacia el cierre de 2018, la paraestatal procesaba tan solo 612 mil barriles de crudo al día, con una producción de petrolíferos de 535 mil barriles diarios. A partir de entonces, se ha observado un aumento sustancial en la oferta de gasolinas en un 35%, así como del 11% en turbosina y diésel, lo que ha reducido significativamente las importaciones de estos combustibles.

Asimismo, Vizcaíno García también destacó que las inversiones realizadas hasta la fecha han permitido la rehabilitación de 61 plantas de proceso y 32 tanques de almacenamiento. Además, se han llevado a cabo 127 reparaciones mayores y 317 reparaciones menores. El objetivo en todas estas acciones es alcanzar la soberanía energética, que parece ser una realidad alcanzable para 2024 con la puesta en funcionamiento de la refinería Olmeca y la adquisición de Deer Park.

Un dato revelador es que las reparaciones mayores realizadas en el SNR en esta administración son cuatro veces más que las realizadas en el mismo periodo de la administración anterior. Además, con la reconfiguración de las refinerías de Tula y Salina Cruz, que incluye la construcción de plantas coquizadoras, se espera un incremento significativo en la producción de diésel, gasolina y turbosina en estos centros. Esta inversión representa un paso estratégico hacia la autosuficiencia energética y un futuro más prometedor para la petrolera y México.