Una historia de resiliencia y resultados inmediatos que terminó con una separación sorpresiva.

Robert Dante Siboldi llegó a Tigres UANL como un salvador en abril del año pasado, justo en medio del torneo Clausura 2023. Esta contratación fue un movimiento desesperado después de que el club decidiera destituir a Marco Antonio Ruiz, quien había reemplazado a Diego Cocca tras solo un mes de gestión. Ruiz, a pesar de su experiencia como asistente de Ricardo Ferretti, no cumplió con las expectativas y fue cesado, dejando el equipo en una situación crítica.

El reto para Siboldi era monumental. Heredó un equipo armado completamente por Cocca, sumido en una racha de estancamiento. La misión era clara: salvar lo que se pudiera del torneo y comenzar a moldear su visión del equipo. Sin embargo, los resultados llegaron más rápido de lo esperado. El entrenador uruguayo, con un estilo de juego poco vistoso pero altamente efectivo, llevó al equipo a una racha impresionante que culminó en la final del torneo nacional contra Chivas.

El duelo final estuvo a punto de convertirse en una despedida amarga para Tigres. Después de un empate sin goles en el partido de ida, Chivas se adelantó con dos goles en la vuelta, pareciendo destinados a levantar el trofeo. Sin embargo, una reacción épica de Tigres, con goles de Gignac y Córdova en el tiempo regular y un cabezazo decisivo de Guido Pizarro en tiempos extra, cambió el destino del campeonato a favor de los felinos.

Esta victoria marcó el segundo título de Siboldi en la Liga MX, el primero había sido con Santos Laguna en el Clausura 2018. Su habilidad para maximizar el rendimiento de jugadores como Sebastián Córdova y mantener la armonía en el vestuario fue notable, especialmente considerando las críticas previas sobre la edad del equipo bajo la gestión de Miguel Herrera.

El siguiente año en Nuevo León fue un torbellino para Siboldi, alcanzando otra final contra América y enfrentando una eliminación en la Liguilla del Clausura 2024 ante Rayados. A pesar de los desafíos y el desarrollo de un juego más atractivo, parecía que el proyecto de Siboldi tenía camino por delante. Sin embargo, la directiva de Tigres decidió no renovar su contrato, dejando uno de los banquillos más codiciados de México vacante y a Siboldi en busca de nuevas oportunidades.

Mientras los rumores sobre su salida continúan sin confirmación oficial, lo cierto es que la gestión de Siboldi en Tigres será recordada como un breve pero brillante periodo donde los resultados inmediatos no fueron suficientes para asegurar su permanencia. Ahora, el futuro de Tigres y de Siboldi se encuentran en una encrucijada, cada uno buscando reconstruir y avanzar por separado.