CDMX a 19 de junio, 2024.- Con la llegada de Claudia Sheinbaum a la presidencia, México se encuentra en una encrucijada para transformar su infraestructura de movilidad urbana. La Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), encabezada por Luis Méndez Jaled, ha presentado un conjunto de propuestas estratégicas que buscan mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y reducir el impacto ambiental.
México ha experimentado un crecimiento urbano desordenado durante las últimas décadas, lo que ha resultado en altos niveles de contaminación y serios problemas de movilidad. Con la Ley de Movilidad Urbana y Seguridad Vial Federal implementada hace dos años, se estableció que las acciones deben ser financiadas a nivel local. Sin embargo, muchos municipios enfrentan desafíos significativos debido a presupuestos limitados.
Luis Méndez Jaled subraya la necesidad de reactivar el Fondo Metropolitano y promover la coinversión privada para iniciar una inversión significativa en movilidad sostenible. «No hay dinero que alcance, pero sí hay dinero para empezar. Reestructurar el Fondo Metropolitano con montos tal vez de 10,000 millones de pesos, junto con dinero de los municipios y coinversión privada, permitiría arrancar proyectos en zonas metropolitanas importantes», explicó.
La CMIC ha desarrollado un decálogo de propuestas estratégicas para abordar los desafíos de la movilidad urbana:
- Fortalecimiento de la planeación urbana y el ordenamiento territorial: Creación de un Instituto Nacional de Movilidad Urbana Sostenible para coordinar esfuerzos.
- Incremento de la inversión en transporte público: Reactivar el Fondo Metropolitano y modernizar los sistemas de transporte público.
- Mejora de la infraestructura para peatones y ciclistas: Ampliar y mejorar las vías peatonales y ciclistas.
- Transición hacia la electromovilidad: Acelerar la adopción de vehículos eléctricos.
- Implementación de sistemas de cobro en zonas de alta congestión: Valorar estos sistemas para reducir el tráfico.
- Gestión Integral de riesgos en Infraestructura y movilidad: Fortalecer la capacidad de respuesta ante emergencias.
- Campañas de educación y sensibilización: Desarrollar campañas para concienciar a la población sobre movilidad sostenible.
- Esquemas de financiamiento alterno: Promover modelos de coinversión público-privada.
- Uso de tecnologías digitales avanzadas: Implementar tecnologías para mejorar la gestión del tráfico.
- Utilización de instrumentos legales e institucionales: Avanzar en el marco legal y las políticas públicas para apoyar la movilidad sostenible.
La colaboración entre el sector público y privado será esencial para el éxito de estos proyectos. Las empresas constructoras deben diseñar y ejecutar proyectos viales a mediano y largo plazo. «Hay que pisar fuerte y proponer proyectos viables para el futuro», dijo Méndez Jaled, enfatizando que la solución a estos problemas no es inmediata, sino un esfuerzo continuo que debe involucrar a todos los sectores de la sociedad.
La llegada de Claudia Sheinbaum a la presidencia representa un punto de inflexión para la movilidad urbana en México. «Estamos listos para diseñar proyectos y trabajar con universidades y otras cámaras industriales para crear un proyecto de nación para los próximos 10, 20 años», concluyó Méndez Jaled.
La movilidad sustentable en México no es una opción, sino una necesidad imperante. Con propuestas claras y un plan de acción bien definido, el país puede avanzar hacia un modelo de movilidad más sostenible, mejorando la calidad de vida de sus ciudadanos y reduciendo el impacto ambiental.
