En una situación de emergencia ambiental que ha escalado rápidamente, los monos saraguatos o aulladores enfrentan un riesgo creciente debido a las altas temperaturas en varias regiones de México. La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), junto con la Comisión Nacional de Áreas Nacionales Protegidas (Conanp) y otros actores, está intensificando esfuerzos para mitigar las afectaciones en estados como Tabasco, Chiapas, Veracruz y Campeche.

Desde los primeros reportes en la Chontalpa, Tabasco, y en municipios chiapanecos, la crisis se ha extendido alarmantemente. En respuesta, se han desplegado brigadas y se están instalando bebederos en áreas críticas como Hueyapan y Catemaco, Veracruz, así como en localidades de Campeche, para asegurar la hidratación y primera atención a estos primates.

La Universidad Juárez Autónoma de Tabasco está por lanzar una Unidad Móvil en Comalcalco para ampliar la cobertura de atención. Además, un contingente de voluntarios está proporcionando ayuda esencial en varias comunidades, reforzando las medidas de soporte vital para la fauna afectada.

Alarmantemente, la Semarnat ha confirmado la muerte de 157 monos aulladores en los estados de Tabasco y Chiapas. A pesar de estas cifras desoladoras, los análisis realizados por el laboratorio de alta seguridad de la Comisión México-Estados Unidos para la Prevención de la Fiebre Aftosa y el Centro Nacional de Servicios de Diagnóstico en Salud Animal han descartado enfermedades emergentes o toxinas como causas directas, lo que refuerza la hipótesis de que las altas temperaturas son el principal factor detrás de estas muertes.

En este contexto crítico, la Conanp ha activado un fondo de emergencia destinado a apoyar las actividades de rescate y conservación llevadas a cabo por las comunidades y la academia. Este esfuerzo coordinado es crucial para prevenir más pérdidas y asegurar la supervivencia de los monos aulladores, un símbolo de la biodiversidad mexicana que hoy clama por nuestra ayuda y acción decisiva.